Esta historia, me la contó alguien y no pude dejarla solamente entre mis mensajes. Le pedí permiso para publicarla y "me la regaló". Bueno, es fácil regalar algo que se sigue disfrutando sólo con su recuerdo, así que la próxima, quiero algo que tal vez pueda ser un recuerdo de ambos. Pero bueno, no pude dejarlo ahí sólo para mí.
P- Hace un tiempo, pasé por mi pequeña de 8 años, por la casa de su mamá, para ir en bicicleta a la escuela. Salió con la bicicleta, dos mochilas y una peluca roja.... Una era su mochila normal. La otra era la de "vestuario " para una obra de teatro de la escuela, pero ya no entró la peluca. Me colgué la mochila más pesada a la espalda, ella hizo lo propio y me propuse llevar la peluca en la mano.... Pero, al cabo de una cuadra, vi que, además de incómodo, podía provocar que se enredara en la rueda delantera y provocar un accidente.... Así que me la puse. No sólo por practicidad, sino por diversión. Llegamos a un cruce importante y muy transitado, ella se sonrojó.
E- Ay papi, todos se te quedan viendo...
P- Y cuando me ven, ¿están enojados?
E- No,... se ríen.
P- Mira qué bonito, aún no dan las 8 de la mañana y ya logré hacer reír a varias personas que ni siquiera conozco, que no sé si volveré a ver y que si las vuelvo a ver, recordarán a un loco que perdió el miedo a reírse de sí mismo, de divertirse consigo mismo y de alegrarle, de paso, la mañana a un montón de gente. Entonces se puso verde el semáforo y seguimos el camino a la escuela, contando a la gente que se sonreía.
La libertad, para mí, es la capacidad de romper todo atavismo para descubrir que nuestra única obligación verdadera en la vida, es ser felices.
¡Gracias!
9 comentarios:
Es precioso me encanta, qué sabio es aquel que sabe reirse de sí mismo, porque hará reir a los demás, y esos instantes de felicidad, son los más sabrosos!!!
Encantadora historia, ser feliz y hacer reir es algo que me encanta. Me gusta ser la payasa del grupo y ser capaz de arrancar una sonrisa en cualquier momento. Un besito Paula de verdad me ha fascinado...
Gracias chicas!! Me encantaría aprender a reírme de mí misma!! :(
Besoss
Querida Paula; me encantó tu escrito y sobre todo tu último párrafo que habla acerca de lo que es la libertad; definición la mejor que he leido sobre lo que es la libertad.
Eso es, dejemonos de atavismos, ataduras, prejuicios porque nuestra unica obligación es la de ser felices, saboreando lo que tenemos no lo que nos falta y sobre todo riendonos mucho de nosotros mismos. Paula, seguro que tu sabes.
Un abrazo enorme amiga
ara
Pauli... simplemente Genial!!!. Si todos nos detuviéramos a ser espontáneos, veríamos las reacciones mas sorprendentes día a día. Fue genial, e imagino que al personaje le dejó una gran lección de vida..Te felicito me encantó. Besos
Ara Y Caro, gracias por pasar!! Si todos siguiéramos a la conciencia, para bien, seríamos tan diferentes que no podríamos creer lo capaces que seríamos de transformar la vida.
Besitosss
Un placer leerte Paula, excente e instructivo relato.
Se habla tanto sobre la libertad...
Volemos alto!
Abrazos, y cuando gustes pasa a visitarme.
Perder la verguenza en beneficio de terceros es un milagro.
También yo usé peluca roja, dentro de un supermercado, en compañía de mi hijo pequeño y de mi hermano.
Mi hermano, después, hubo de pagar la apuesta.
Adriana gracias por pasar! Si, se habla tanto pero no aprendemos nunca!
José, me alegra que ganaras la apuesta!!
Besosss
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